La felicidad es un abrigo rojo con el forro roto.
-Julian Barnes
El 8 de julio, compré este libro junto con una antología de poesías de Mario Benedetti que me leí de un tirón. Anoche, a casi las 2 am, acabé por terminarlo.
Como dice el título, una buena opción para quienes se les viene encima el día del amigo (mañana) y tienen que hacer algún presente, para aquella amiga que capaz lee cada tanto, o casi ni toca un libro, como es el caso de nuestra protagonista, pero con una suerte que le salva la vida llega a sus manos este libro.
En París, de vez en cuando, llueve a cántaros y sopla el viento del norte tan fuerte que parece no haber resquicio donde refugiarse. Como cuando las borrascas llegan al corazón y no sabemos cómo ni dónde esperar a que escampe.Para Aurélie las casualidades no existen. Una tarde, más triste que nunca, se refugia en una librería y en un libro. Arrebujada en sus páginas, Aurélie reencuentra la sonrisa que creía haber perdido para siempre. Y muchas cosas más.
Protagonista de una portada especial y un título casi engañoso, que llaman la atención que esconde una linda historia de amor e infortunios.
Mi parte favorita (como no), es el final. Más bien el epílogo ya que el mismo final, clásico, muy parisino. Con el acompaña una bonita historia de amor, una protagonista entrañable y un editor (también protagonista) un poco renegado (si, en algún momento me irrito un poquito mucho porque evitaba que mi lectura avanzara) pero cuando ve por primera vez a nuestra Aurelie se queda prendado a ella, sus ojos y su restaurante.
De qué peca? Empezó con furia y luego pinchó un poco, que durante un momento dude en seguir la lectura, me tomé los días y luego retomé. -Esto sucede con la literatura actual, a lo rápido, que se devora, y no siempre fue así. Pero se ve que así a la caza están las editoriales con este tipo de novelas de lectura súper rápida.- Sigo, para bien o para mal, el desenlace y final hizo que valiera la pena retomar mi lectura, un poco abrupto, sí, pero también disfruta de dejarnos picando. Así que no es para tanto, lectores.
(algunas imágenes, de lugares citados en el libro)
Avanza y lleva con él, una bonita historia de amor, con tintes culinarios y literarios, abrigos rojos y París. Consigo trae además un poco de intriga, que me ponía nerviosa por saber como terminarla.
El plus? Recetas de cocina! Una excelente forma de terminar el libro fue la inclusión de algunas palabras Nicolas Barreau y recetas, entre las cuales, mi favorita es el gateau au chocolat.
“La felicidad y la desdicha están a veces muy cerca. Expresado de otra forma, se podría decir que la felicidad da a veces curiosos rodeos.”
Si tuviera que ponerle una nota, sobre 10, probablemente sería un 7 u 8, el libro prometía un poco más de lo que me dio, por toda la furia que empezó y el rapidísimo final.
Algún día me gustaría hablar con ustedes un poco más de los libros parisinos. Leyeron alguno? Que lecturas tienen esta semana?
Saludos!!
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